En un escenario post-apocalíptico recreado en el Grand Palais de París, el maestro Karl Lagerfeld vuelve a dejar estupefacto al mundo de la moda con la colección de alta costura de Chanel para el otoño del 2013.
Una danza de texturas y volúmenes en tonos metalizados y oscuros pero refinados con toques pasteles nos mostró la elegancia y exquisitez que definen a esta marca desde sus inicios.
Esta vez Lagerfeld se convierte en el amo del tweed y lo regresa a escena de una forma dramática pero genial al combinarla con distintos estampados y texturas como las lentejuelas y las telas de hilos metalizados conjuntando todo en un look beauty.
Muestra una naturalidad y sencillez impecable en cuanto a maquillaje, peinado y accesorios pero con remembranzas a finales de los años 80's con esos tupés altos y anchos cinturones.
Un detalle para resaltar fue el calzado, botas de caña súper alta que se funden con las prendas y crean la ilusión de ser parte de la misma modelo.
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